lunes, 25 de noviembre de 2024

Synaxis de los nuevos mártires rusos de Optina - San Anatolio II "el joven"

 

SYNAXIS DE LOS NUEVOS MÁRTIRES RUSOS DE OPTINA

25 de noviembre / 12 de noviembre  Calendario Eclesiástico

 


Icono de San Anatolio II "el Joven" de OPTINA


I – OPTINA

 

En este día la Iglesia Ortodoxa conmemora a varios miembros del Monasterio del Optina, que con la llegada del bolchevismo a la Santa Rusia, hallaron la muerte defendiendo su Fe.

El Monasterio de OPTINA, se encuentra cerca de Kozelsk en el óblast de Kaluga, habiendo sido uno de  centros espirituales más importantes de Rusia en el siglo XIX. Fue famoso por sus staretz que perduraron hasta el cierre del mismo por parte del Soviet.  Frecuentaron también sus instalaciones escritores como Nikolai Gógol, Fiódor Dostoyevski (que se inspiraría en el mismo al escribir sobre el personaje del staretz Zosima de la novela Los Hermanos Karamasov), León Tolstoi y Konstantin Leóntiev.

 

En este día relataremos brevemente la vida de uno de esos mártires: ANATOLIO II de Optina.

 


 

II – SAN ANATOLIO II DE OPTINA: SUS INICIOS

 

El hierconfesor Anatolio II (Aleksandr Potapov) de Optina , nació a mediados del siglo XIX, el 15 de febrero de 1855 en la ciudad de Moscú . De joven, recibió el llamado hacia la vida eremítica dentro de la iglesia, pero desde un principio tuvo la oposición de su madre. Se graduó en la escuela del distrito y luego se dedicó al comercio que era el rubro laboral de su familia, desempeñándose como empleado en la ciudad de Kaluga.

 

Cuando su madre fallece en el año  1885, pudo el joven Aleksandr ir por su búsqueda espiritual.

 

Arribo al Monasterio de Optina, y fue nombrado novicio en el año 1888. Por entonces  el Monasterio de OPTINA,  era uno de los más reconocidos dentro del Imperio Ruso. Eran los tiempos del staretz AMBROSIO, del cual, el joven Aleksandr fue su celador, esto es un misionero al servicio del staretz, para cumplimentar toda directiva del mismo.

 

En el año 1895, fue tonsurado monje asumiendo el nombre de ANATOLIO.

 

 

III – STARETZ DE OPTINA

 

Durante años estará al servicio de los staretz de Optina, y en el año 1891, a la muerte de Ambrosio, asumirá funciones de staretz en el Monasterio, aunque para entonces no tenía cargo religioso alguno. Recién por el año  1906 será ordenado al diaconado.

 

Desde un inicio, Anatolio se volcó a la práctica de la Oración del Corazón, una de las actividades espirituales por las que más se destacó en su historia el Monasterio. Participaba incansablemente de todo el ciclo de oraciones del Monasterio, llegando a casi no dormir, viviendo un estado de calma y reflexión que eran reconocidos por sus pares.

 

 


IV – ¿”TRÁGICA” VISIÓN?

 

En el año 1917, se produce la Revolución Bolchevique, y las hordas soviéticas comenzarán a atacar todas las propiedades de la Iglesia Ortodoxa, donde el Monasterio de Opina, no sería la excepción.

 

El 27 de febrero de 1917, cuando el emperador Nicolás se preparaba para abdicar, el padre Anatolio profetizó que la unidad organizativa de la Iglesia rusa se dividiría en varias ramas o escisiones. Sin embargo, no lo vio a ello como negativo, sino como una NECESIDAD de salvar la Iglesia de su ruina, y que cuando los tiempos fueran los elegidos por Dios, estar volvería a reunirse.

 

 

V – PREPARARSE PARA LA MUERTE

 

En enero de 1918, Óptina Pustyn cerró por decisión del Soviet, aunque se mantuvo hasta  1931 una  comunidad de ermitaños entre los cuales estaba el staretz ANATOLIO II.

 

A principios de los años 20, bajo el régimen bolchevique, el padre Anatolio fue objeto de ataques y torturas  por parte de los soldados del nuevo  Ejército Rojo.  Soportó muchos sufrimientos, pero siguió recibiendo visitas de fieles ortodoxos ante el disgusto de las autoridades soviéticas.

 

Un año antes de su muerte, el monje rector, Isaac, le hará entrega al staretz Anatoly el Gran Schema, fruto de una labor incansable como hieroconfesor y practicante de la hesiquia.

 

En la tarde del 29 de julio de 1922, los soldados llegaron para arrestarlo nuevamente. Esta vez, la historia no se repetiría: El staretz ANATOLIO, pide a sus captores que le dejen prepara sus cosas para el viaje al centro de detención.

 

A la mañana siguiente, los soldados regresaron y preguntaron al encargado de la celda del anciano si estaba listo. Según los testimonios, fueron atendidos por el padre Bernabé, quién  los invitó a ingresar a la celda del staretz ANATOLY.

 

Allí encontraron al Padre Anatolio en medio de su celda, completamente "preparado", yaciendo muerto en su ataúd. El Señor se lo había llevado durante la noche para ahorrarle más sufrimiento.

 

 

VI – GLORIFICACIÓN

 

El staretz ANATOLIO II de Optina fue glorificado junto con todos los ancianos de Optina por la Iglesia Ortodoxa Rusa en el Exterior,  en el año de 1990. La festividad de San Anatolio II de Optina pasaría a ser el 30 de julio.

 

QUE SU MEMORIA SEA ETERNA

 

Compilación: Patriarcal Ateneo San Marcos

 

martes, 12 de noviembre de 2024

Para ti esta escrito

 

PARA TI ESTA ESCRITO

 



En el Evangelio el lector es siempre a quien se dirige el mensaje. No estamos en una multitud que escucha de lejos, nos habla a cada uno de nosotros. Nos revela la Luz y esta Luz no puede ocultarse. Como una verdad incómoda, desafía las expectativas y revela la insuficiencia de mente secuestrada por la vida material.

 

Jesús es una interrupción radical en el orden establecido, es un llamado a vernos y transformarnos desde el interior, valorando quienes somos desde nuestra naturaleza de Hijos de Dios.

 

Archimandrita Gregory

IOBE – Argentina

jueves, 24 de octubre de 2024

Synaxis de los Staretz de Optina - Hieromartir Archimandrita ISSAC II, Bobrakov

 

24 de octubre  / 11 de octubre  – Calendario Eclesiástico

SYNAXIS DE LOS STARETZ DE OPTINA

 



En el día de la SYNAXIS DE LOS STARETZ DE OPTINA, recordamos a su último abad: Hieromartir Archimandrita ISAAC II (Bobrakov),

 

Nació en el año 1865 en el pueblo de Ostrov, provincia de Orel Ivan Nikolayevich Bobrikov. Hijo de una humilde familia campesina.

 

En 1884 entró en el monasterio de Optina como novicio. Fue el último abad del monasterio de Optina, y se distinguió por su gran calma, sencillez y por la abundancia de lágrimas que derramó durante los servicios divinos.

 

Cuando el monasterio de Optina se cerró en 1923 por acción del gobierno soviético, varios de los monjes dirigidos por el P. Isaac permaneció en Kozelsk, donde sirvió en la iglesia de San Jorge.

 

En agosto de 1929, en el segundo o tercer día después de la Transfiguración, todos los monjes de Optina, encabezados por el Padre Isaac, fueron arrestados y encarcelados en la prisión de Kozelsk. Los arrestados fueron enviados a la prisión de Sukhinichi, y de allí a Smolensk.

 

En enero de 1930, después del final de la "investigación" realizada por el gobierno ateo y genocida soviético, el Padre Isaac, fue exiliado a Siberia junto con otros de los monjes de Optina, donde, según una fuente, acabaron con sus vidas.

 

Según otra fuente, el Padre Isaac fue exiliado a Belev en la provincia de Moscú. Se lo dejó libre por entonces, hasta el 16 de diciembre de 1937, donde el Archimandrite Isaac fue arrestado. El 30 de diciembre fue condenado a muerte por la "troika" de la NKVD en Tula. El 8 de enero de 1938, recibió un disparo junto con otros monjes Optina en el bosque de Tesnitsky cerca de Tula.

 

QUE SU MEMORIA SEA ETERNA

sábado, 19 de octubre de 2024

ESCLARECIMIENTO

 

ESCLARECIMIENTO



Icono del Juicio Final


La Iglesia de Cristo existe en este mundo como la presencia del Reino de Dios aún por venir, y por lo tanto:

-No existe en este mundo para su relativa mejora.

-No existe para promover o defender una determinada ideología, una política económica o programa social. Cuando hay un Hombre de BIEN, las ideologías son innecesarias.  

-No existe para anunciar más “novedades” revolucionarias, que no sean  las que Cristo mismo nos brindó a través de las Sagradas Escrituras, la Tradición de los Padres de la Iglesia y del testimonio de sus Santos.

El Santo Mártir Pavel Florenski nos decía que debíamos asumir un “optimismo trágico” de la vida, ya que esta no es una “fiesta y una diversión continua”, en tanto la misma poseía muchos aspectos pecaminosos que nos desvían de lo ESENCIAL.

Y, justamente, la Iglesia Ortodoxa nos enseña que el ICONO, es el portal de la belleza que precede, que anuncia, nuestro camino hacia la Eternidad, a un Reino, que como decíamos al comienzo: no es de este mundo (Juan 18:36)

Compilación: Patriarcal Ateneo San Marcos

lunes, 14 de octubre de 2024

La Protección de Nuestra Santísima Theotokos

 

14 de octubre de 2024 / 01 de octubre de 2024

LA PROTECCIÓN DE NUESTRA SANTÍSIMA SEÑORA THEOTOKOS Y SIEMPRE VIRGEN MARIA

 



I – CUSTODIOS DEL MANTO

 

La Iglesia Ortodoxa conmemora en este día la fiesta llamada “La Protección de la Virgen”. Relataremos la historia del descubrimiento del manto de la Virgen llamado "maphorion" u "omophorion" (del griego omos = hombro y espalda).

 

En tiempos del León I, “el Tracio” (457-474), emperador del Imperio Bizantino, nos cuenta San Máximo el Confesor, que había dos príncipes: Galbios y Cándidos, hermanos de sangre y hasta de generosidad. Un día surgió en estos príncipes el deseo de peregrinar a Jerusalén para venerar los lugares santos. Reunidos en Palestina, emprendieron el camino hacia Galilea, para visitar Nazaret y Cafernaún. Al llegar se alojaron en una pequeña aldea donde, con muchos otros, moraba una mujer virgen de avanzada edad. Esta mujer era la encargada de la custodia del tesoro de la santa capa de la Madre de Cristo, nuestra señora y siempre virgen maría.

Providencialmente, se albergaron en su casa los príncipes. En el interior de la vivienda descubrieron una habitación en la que siempre había encendida vales: estaba saturado de incienso aromático, y yacían allá muchos enfermos. Con los más insistentes ruegos pidieron a la anciana que les revelara toda la verdad. Habló ella, desde lo más hondo del alma, llorando y con ojos bajos, diciéndoles como avergonzada: “A nadie, señores, hasta hoy se les ha revelado este misterio: mis padres me lo confiaron con juramente a mí, su única hija”. El secreto se le había confiado a una virgen, a fin de que ella, a su vez, en el momento de la muerte se lo confiase a otra. “En la actualidad le correspondió a la que estáis viendo”, dijo. “Esto es lo que hasta hoy se ha venido transmitiendo en mi familia: que una mujer permaneciera virgen. Pero después de mí no hay ya nadie a quién pueda dar a conocer el hecho; por lo que les voy a revelar esto a vosotros”. “Se halla ahí depositada la capa de la Madre de Dios”.

 

II – RUMBO A CONSTANTINOPLA

 

Los dos príncipes, tomaron el manto de la Madre de Dios, y lo llevaron a Jerusalén, hasta que en el año 472 Galbios y Cándidos, la llevaron a Constantinopla, siendo depositada en el Santuario de BLAQUERNAS, un suburbio del noroeste de Constantinopla donde residirá la segunda iglesia más importante.

 

No siempre estuvo la reliquia segura. En junio del año 619 la reliquia fue escondida ante una incursión de bandidos. Sería devuelta al santuario el 2 de julio del mismo año, una fecha que se convirtió en una celebración mariana, o sea: "fiesta de la 'Deposición en la basílica de Santa María de las Blanquernas de la santa Túnica de la Theotokos'".

 

III – MILAGRO DEL SANTO MANTO DE LA THEOTOKOS

 

"La Virgen hoy se presenta dentro de la Iglesia, y con los coros de los Santos invisiblemente por nosotros ora a Dios: los ángeles con los jerarcas hacen reverencia, y los apóstoles con los profetas cantan: por nosotros el Dador de Dios ora al Dios Preterno"

 

En el año 911, Constantinopla se vio ante un ataque enemigo y el pueblo acudió a la Iglesia de Blaquernas para pedir la protección de la Virgen.

 

San Andrés, un “loco por Cristo”, tuvo una visión en la que veía a la Virgen entrar a la Iglesia cuando estaba llena y tomar el velo y ponerla sobre toda la asamblea como símbolo de protección. El relato consiste en lo siguiente:

 

“a la hora cuarta de la noche levantó los ojos hacia el cielo y vio venir por el aire a nuestra Santísima Señora Madre de Dios resplandeciente de una luz celestial y rodeada de una asamblea de los santos. El santo Bautista del Señor Juan y el santo Apóstol Juan el Teólogo acompañaban a la Reina del Cielo. De rodillas, la Santísima Virgen comenzó a orar con lágrimas por los cristianos y durante largo tiempo estuvo en oración. Luego, acercándose al trono del Presbiterio, continuó su oración y, una vez terminada, se quitó el velo de la cabeza y lo extendió sobre las personas que oraban en la iglesia, protegiéndolas de los enemigos visibles e invisibles. La Santísima Señora Madre de Dios resplandecía de gloria celestial y el velo protector en Sus manos brillaba "más que los rayos del sol".

 

Seguidamente, la Santísima Madre de Dios imploró al Señor Jesucristo que aceptase las oraciones de todo el pueblo, invocando su Santísimo Nombre y acudiendo a Su intercesión:

"Oh Rey, acepta a toda persona que te ruega e invoca Mi Nombre en busca de ayuda, que no se vaya con las manos vacías sin ser escuchada ante Mi Rostro".

Los santos Andrés “loco de Cristo”, y su discípulo, Epifanio, se les concedió contemplar a la Madre de Dios en oración, "durante mucho tiempo contemplaron el velo protector extendido sobre el pueblo y los relámpagos como destellos de gloria para el Señor; mientras la Santísima Madre de Dios estaba allí, también el velo protector era visible; pero con Su partida también se hizo invisible, y aunque lo llevó consigo, dejó atrás la gracia de haber estado allí".

 

En la iglesia de Blaquernas se conservó el recuerdo de la aparición milagrosa de la Madre de Dios.

A partir de ese día el ataque a Constantinopla se detuvo. Fue desde ese entonces que la Iglesia dedica el 1 de octubre a recordar a los fieles que la Virgen María es, además de nuestra Madre, nuestra Protectora en toda aflicción.

 


 Icono Monasterio-Zverinsky, 1399 Novgorod


IV - ¿DE QUIEN ERA LA AMENAZA?

 

La fuente rusa nos habla de una fiesta importante, ya que se celebra la destrucción divina por una tormenta de una gran flota pagana-rusa bajo el mando de Askold y Dir que amenazaba a la propia Constantinopla, en algún momento entre los años 864 y 867, o según el historiador ruso Vasiliev el 18 de junio de 860.

 

La Crónica Primaria Rusa de San Néstor señala esta liberación milagrosa después de la vigilia que duró toda la noche y la inmersión de la vestimenta de la Madre de Dios en las aguas del mar en la iglesia de Blaquernas, pero sin mencionar a los santos Andrés y Epifanio y su visión de la Madre de Dios en oración.

 

 

V – INTERCESORA

 

En el prólogo de un libro ruso del siglo XII se describe la instauración de una fiesta especial en honor de este acontecimiento: "Cuando lo oímos, nos dimos cuenta de lo maravillosa y misericordiosa que era la visión y, además, de la expectativa y la intercesión en nuestro favor, sin celebración... y resultó que Tu santa Intercesión no debía quedar sin celebración festiva, ¡oh Bendita sea! ". Por eso, en la celebración festiva de los servicios divinos a la Intercesión de la Madre de Dios, la Iglesia rusa entona:

"Con los coros de los Ángeles, Oh Soberana Señora, con los venerables y gloriosos profetas, con los Apóstoles de primer rango y con los Sacerdotes Mártires y los Santos Jerarcas, ruega por nosotros, pecadores, glorificando la fiesta de Tu Intercesión en la Tierra Rusa".

En Rusia, en el siglo XII aparecieron iglesias en honor de la Intercesión de la Santísima Virgen María. Muy conocido por sus méritos arquitectónicos es el templo de la Intercesión de la Santísima Virgen en Nerla, construido en el año 1165 por el santo príncipe Andrei Bogoliubsky. Gracias a los esfuerzos de este santo príncipe, también se estableció en la Iglesia rusa la fiesta de la Intercesión de la Santísima Virgen María, hacia el año 1164. En Nóvgorod, en el siglo XII, existía un monasterio de la Intercesión de la Santísima Virgen María (el llamado monasterio de Zverin); en Moscú, también bajo el zar Iván el Terrible, se construyó la catedral de la Intercesión de la Santísima Virgen María en la iglesia de la Santísima Trinidad (conocida como la iglesia de San Basilio el Grande).

 


Icono Novgorod 1401-1425


VI – OTROS MILAGROS DE PROTECCIÓN


En el XVII, otro evento calificado de milagroso sucede cerca de Azov, en 1641. Ese año los turcos asediaron la fortaleza más de tres meses con fuerzas muy superiores en número a la pequeña guarnición cosaca que la defendía. Hasta un total de 24 ataques se sucedieron y en toda la resistencia de la guarnición cosaca obligó a los turcos a abandonar el intento tras sufrir grandes pérdidas. La victoria fue atribuida a la protección de la Santísima Virgen. Desde entonces la fiesta ortodoxa de la Intercesión de la Madre de Dios, que se celebra el 14 de octubre, fue adoptada por el ejército de los cosacos del Don como su principal fiesta militar.

 

Más modernamente, ya en el siglo XX, tras un olvido de mucho tiempo, la Fiesta de la Intercesión, que no se celebraba en Grecia, donde surgió en el siglo X, fue recuperada. El pueblo griego atribuyó a la protección de la Santísima Virgen la liberación final de Grecia durante la Segunda Guerra Mundial. La Iglesia de Grecia, por decisión sinodal, recuperó la Pokrov, la fiesta de la Protección de la Santísima Virgen, que desde entonces se celebra en Grecia el día 28 de octubre, día de la liberación de Atenas.


VII – LA ICONOGRAFÍA

La formación de la iconografía de la Fiesta de la Intercesión de la Santísima Madre de Dios se remonta al siglo XII, aunque las imágenes más antiguas que se conservan se remontan al siglo XIII, una época marcada en Rusia por la construcción de templos y monasterios dedicados a este evento.

Generalmente se acepta destacar dos versiones iconográficas principales de la Intercesión: la llamada "Suzdal" (desarrollada en la Rusia central) y "Novgorod". En el primer caso, la Madre de Dios está representada frente al templo, extendiendo su maforium (especie de foulard que cubría la cabeza) sobre todos los presentes. En la versión "Novgorod", el velo está sostenido por ángeles, y no por la misma Madre de Dios, representada dentro del templo sobre las puertas reales cerradas.

Ambas opciones tienen características similares:

A) Como regla general, se figura un testigo ocular del milagro ocurrido en Blaquernas. Se trata de San Andrés, el Loco de Cristo, señalando la imagen de la Virgen a su joven discípulo.

B) El velo que simboliza la intercesión de la Virgen se pinta de un rojo brillante, siguiendo la descripción de la visión que hizo Andrés, que enfatizó que el velo protector extendido era "como un rayo”.

C) A partir del siglo XV-XVI los iconos de la Intercesión muestran una línea convergente entre las dos escuelas, caracterizándose por la figuración de un mayor número de personajes.

 

Compilación: Patriarcal Ateneo San Marcos

viernes, 6 de septiembre de 2024

Grandes y Pequeños pasos

 

GRANDES Y PEQUEÑOS PASOS

 



A veces, solemos escuchar que para llegar a ser alguien importante, es necesario hacer cosas de gran relevancia para la sociedad.

 

Para convertirnos en eso, primero debemos emprender MUCHAS ACCIONES aparentemente de poca importancia o insignificancia, pero que, en el fondo, no serán ni intrascendentes ni insignificantes.

 

Quienes en la vida han dado grandes saltos y han fracasado, abandonaron sus metas ante el esquivo resultado. Si hubieran escuchado a los staretz, habrían dado MUCHOS saltos pequeños, antes de alcanzar aquel que le produjo la caída, y superarlo sin dificultar yendo aún más allá.

 

Aquí se dirime la lucha interior entre el fuego de una pasión pasajera, por el de mantener una llama constante, que nunca se vea amenazada por la oscuridad.

 

Si tomamos el segundo camino, con el tiempo inexorablemente, nos convertiremos en ALGUIEN que se respetará a sí mismo y, hacia fuera, al decir de Goethe: convertirse en ALGUIEN que hará cosas de importancia según sus testigos, sus circunstanciales espectadores.

 

La realidad, es que no hizo realmente nada de gran importancia, sino que mantuvo la llama encendida, que a los demás los estará obnubilando.

 

Camino de la Jangada

 

domingo, 21 de julio de 2024

San PROCOPIO loco de Cristo

 

SAN PROCOPIO, LOCO DE CRISTO

21 de julio de 2024 / 08 de julio de 2024 – Calendario Eclesiástico

 



I – PRIMER LOCO DE CRISTO DEL MUNDO ESLAVO

 

Se considera que el primer verdadero santo loco en Rusia, San Procopio de Ustyug.

 

Es de suponer que Procopio vivió en el siglo XIII y el año de su muerte en 1302. Sin embargo, la primera vida de Procopio se escribió recién en el siglo XVI y contiene muchas inconsistencias. Por lo tanto, no es posible conocer en detalle los años de vida del bendito hacedor de milagros.

 

Se dice que provenía de una familia noble de comerciantes patricios de Lübeck (actual Alemania). Tras la muerte de su padre, en conflictos militares, Procopio se vio obligado a abandonar Prusia. Cargó sus riquezas en barcos y partió hacia Veliky Novgorod.

 

II – CONVERSION

 

San Procopio fue un comerciante extranjero, un alemán católico, que tenía su comercio en Novgorod. Maravillado por la belleza de los oficios ortodoxos, abrazó la ortodoxia, repartió sus riquezas entre los indigentes. Fue bautizado en la Ortodoxia en el Monasterio  de Khutyn e ingresó como monje en dicho convento (fundado en 1192) y famoso por el rigor de sus reglas y la santidad de la vida de sus monjes.

 

 

III – CAMINO AL DESIERTO

 

Aquellos novgorodianos que lo conocían, al enterarse de que Procopio aceptó la santa fe y entregó todas sus propiedades, comenzaron a alabarlo y ensalzarlo. A Procopio le resultaba difícil oír semejantes comentarios sobre sí mismo. La gloria humana, que privaba de la paz a su humilde corazón, se convirtió para él en una carga insoportable.

 

Temiendo perder su gloria celestial a causa de ella, le reveló su dolor espiritual a  su  staretz Varlaam Prokshinich, y comenzó a pedirle consejo y bendiciones para retirarse a algún lugar donde nadie lo conocería.

 

Al principio, el anciano lo contuvo, aconsejándole que mejor no abandonara el monasterio e incluso se recluyera, pero el deseo de Procopio era inflexible, como si algo lo estuviera arrastrando fuera del monasterio. Y no importa cuánto lo intentaron, no pudo detenerlo y, después de darle instrucciones, el mayor, con oración y bendición, envió a su alumno en su camino.

 

Muchos sufrimientos tuvo que aguantar durante el cumplimiento de su difícil sacrificio. Durante el verano y el invierno, caminaba, descalzo y mal vestido, pernoctando en los atrios o, simplemente, sobre el suelo. Recibía limosnas de gente piadosa, pero, aunque estaba hambriento, nada aceptaba de los que mediante engaños habían adquirido sus riquezas, quedando así, sin comer nada durante varios días.

 

Sufrió muchas burlas e insultos, maldiciones y palizas por parte de personas groseras en el camino, tuvo que soportar mucho en sus viejos harapos tanto del calor del verano como de las ventiscas invernales y las heladas amargas. Pero no se desanimó, sabiendo que cada día de su sufrimiento voluntario, cada paso en este camino estrecho y verdadero, hacia  la cruz lo acercaba a la paz eterna y a la Patria Celestial.

 

IV – BAJO EL PORTICO

 

Después de vagar durante mucho tiempo por la ciudad, perseguido e insultado por todas partes, el justo Procopio finalmente eligió como residencia permanente un rincón del pórtico de la enorme  iglesia catedral de la Dormición de la Madre de Dios, cortada en madera. Aquí comenzó a pasar verano e invierno, sin faltar a un solo servicio religioso, pasaba las noches en oración y durante el día deambulaba por las calles de la ciudad.

 

V - EL MILAGRO DE LA BRISA CELESTIAL

 

Una vez, durante una terrible helada, aquella durante la cual los pájaros en vuelo se congelan, el beato buscaba un refugio. En las casas no lo recibían. Hasta los perros, al lado de los cuales quería entrar en calor, huían de él. Procopio se estaba congelando. Repentinamente comenzó a soplar una templada brisa celestial y un ángel rozó su rostro. Gracias a todo esto, el beato entró en calor y volvieron sus fuerzas. Este milagro fue relatado por el beato a Simón, un clerigo de la catedral; además le pidió no difundirlo antes de su muerte.

 

 

VI – CLARIVIDENCIA

 

Por sus sacrificios, el beato fue distinguido con el don de clarividencia. Un día se inclinó ente una niña de 3 años y les dijo: "He aquí a la madre de un gran santo." La niña fue la madre del Jerarca Esteban de Perm.

 

En el año 1290,  durante una semana deambuló por la ciudad instando a los habitantes a arrepentirse y rezar, para que el Señor salve a la ciudad del destino de Sodoma y Gomorra (Génesis, capítulo 19). Nadie le creía.

 

El realizaba la siguiente advertencia: “La ira de Dios se acerca, arrepentíos, hermanos, de vuestros pecados, apaciguad a Dios con ayuno y oración, de lo contrario la ciudad perecerá bajo una lluvia de fuego”.

 

“Está loco y nunca dice nada sensato. ¿Por qué escucharlo? - dijeron los habitantes de Ustyug y no prestaron atención a las palabras del justo.

 

Repentinamente apareció en el cielo una nube siniestra. La nube crecía y crecía, de tal manera que el día se convirtió en noche. Centelleaban los relámpagos, bramaba el trueno con tanta fuerza que estremecía los muros de los edificios. El ruido de la tormenta tapaba el clamor de los habitantes. Todos tuvieron un presentimiento de destrucción y de muerte. Los habitantes corrieron a la catedral. Allí, ante el icono de la Anunciación, rezaba el beato. Y el milagro ocurrió. Una fragancia llenó el templo. El mirra que fluía del icono milagroso era tan abundante que se pudieron llenar todos los recipientes que se encontraban en la iglesia. La gente se juntaba y se curaba de sus males. Después el sofocante aire refrescó y se asomó el sol.

 

A 20 km. de Ustyug, en el prado de Kotovalsk las nubes desencadenaron granizo y relámpagos. El granizo quebró el bosque de muchos años, pero no produjo daño ni a la gente, ni a los animales. En recordación de la salvación de la ciudad de su destrucción, fue establecida la festividad del icono de la Virgen de Ustyug.

 

VII – UN LUGAR ESPECIAL

 

El santo loco de Cristo, tenía un lugar especial: cerca de la Catedral corría el río Sukhona, a donde el santo se acercaba y se sentaba en una parte elevada al borde del río, y desde ahí, miraba a lo lejos orando al Señor para que protegiera a las personas que cruzaban el ancho e inquieto río.

 

Todos en la ciudad sabían que mientras Procopio estaba sentado sobre esa alta orilla, podías entrar al agua con seguridad y nadar hacia el otro lado. En este lugar, que amaba, el santo necio pidió ser enterrado cuando le llegara el momento de presentarse ante el Señor.



 Icono de Procopio de Ustyug, en oración al Salvador


VIII - NACIDO A LOS CIELOS

 

Un verano, mientras oraba por la noche como era su costumbre, Procopio sintió un toque familiar en su mejilla. Levantó los ojos y un ángel blanco se paró frente a él y le dijo:

 

- Prepárate, Procopio, tu aventura terrenal llega a su fin, el 8 de julio el Señor te llevará consigo.

 

Dijo ello y desapareció. Al día siguiente, Procopio les contó a todos sobre el milagroso fenómeno y comenzó a esperar ansiosamente el día señalado.

 

La noche del 8 de julio fue cálida, Procopio salió de las murallas de la ciudad, dirigiéndose a las puertas del Monasterio del Arcángel de Ustyug. Se arrodilló y oró por última vez, se acostó de costado, se acurrucó y murió tranquilamente. Era el año del Señor del 1302. Los monjes del Monasterio lo encontraron cubierto de una sábana de nieve.

 

La glorificación eclesiástica del Beato Procopio tuvo lugar en el Concilio de Moscú de 1547; su memoria fue erigida el 8 de julio.

 

Gracias a la intercesión del bendito, muchos de los que acudieron a su ayuda en oración recibieron curación de diversas enfermedades.

 

IX – SU ORACIÓN FINAL

 

Dicen los relatos de su vida, que está fue su oración final, antes de ir al regazo del Padre de los Cielos:

 

“¡Señor Soberano Jesucristo, Hijo de Dios, Todopoderoso, Creador de toda creación visible e invisible! Ahora yo, siervo tuyo pecador e indigno, entrego mi alma en tus manos. Tú, Señor, sembraste en mi corazón el mayor amor por la fe verdadera y me sacaste de la tierra latina inmunda y de la fe, fuera de mi patria. Tú, Señor, me elegiste entre tus siervos, no me dejaste perecer con los lícitos en las tinieblas de mi patria: me alejaste del mundo de las riquezas vanas y codiciosas. Tú, Señor, desde pequeño me diste paciencia en los negocios y en las dificultades; Tú, Señor, me concediste permanecer desnudo en la necedad y en numerosos vagabundeos, para ser oprobio de la gente. Tú, Señor, me diste Tu mayor manifestación sobre la ciudad de Ustyug. Tú, Señor, me has recompensado con el don de soportar las severas heladas invernales. Tú, Señor, me diste vida, me sacaste de la decadencia y hiciste mi cuerpo invulnerable a las heladas. Tú, Señor, no te apartes de mí hasta que mi alma abandone el cuerpo. Cumple, oh Señor, mi petición; hasta el final deseo permanecer en la mayor bondad y atravesar serenamente los comienzos y los poderes de las fuerzas oscuras”.

 

X – TROPARIOS DE SAN PROCOPIO


Troparion, tono 4

 

Iluminado por la gracia divina, sabio de Dios, / y toda la mente y el corazón de este mundo de este mundo al Creador, inquebrantablemente consagrado / con castidad y mucha paciencia, / en la vida temporal el flujo del bien pasaste / y guardaste la fe inmaculada. / Asimismo, después de la muerte, apareció el señorío de tu vida:/ fluyes con una fuente inagotable de milagros/ fluyendo con fe hasta tu santo sepulcro,/ oh bendito Procopio,/ ruega a Cristo Dios,/ que él salve nuestras almas.

 

Troparion, tono 4

 

En tu paciencia de Dios recibiste la recompensa de los dones de profecía, oh bendito, a través de oraciones, vigilias y ayunos, agotando tu cuerpo y elevando tu alma al Celestial, el Rey de todos, Cristo Dios, es poderoso. Tuviste el honor de verlo / y fuiste atado con una corona inmarcesible / Desde su rostro, de pie ante los santos, / ofreciendo tu oración por el pueblo, / fuente de cálidas lágrimas derramadas, / liberaste la ciudad de Veliky Ustyug y su gente del terrible cobarde, y del fuego, y de la vana muerte./ Esos también nosotros, postrándonos a tu honesta raza, clamamos a ti:/ Oh Procopio, hacedor de milagros,/ sé nuestro intercesor ante el Señor/ en los días de dolores encontrados, tu siervo,/ y rogamos que salve nuestras almas.

 

Compilación: Patriarcal Ateneo San Marcos