POR NUESTRA AMADA PROVINCIA DE CORRIENTES
“Bendito es el pecado que vuelve a su sentido durante este
periodo terrible y recuerda el ilimitado amor del Padre Celestial, las riquezas
espirituales ilimitadas que se otorgan en la casa del Padre Celestial, la Santa
Iglesia. Bendito es el pecador que, horrorizado por su propio pecado, quiere
liberarse de su peso opresivo por medio del arrepentimiento.”
San Ignacio Briantchaninov (Fragmento Homilía por la
Parábola del Hijo Prodigo)
El verano del mes de febrero de 2022 será un tiempo
largamente recordado por muchas familias de la Provincia de Corrientes,
República Argentina a raíz de un terrible incendio que ha enlutado a toda la
provincia. Miles de hectáreas quemadas, una incontable cantidad de animales,
tanto de cría como silvestres han muerto terriblemente entre las llamas. Ya,
hemos empezado a contar vidas humanas que han partido en medio de esta lucha
contra el fuego.
NO es la primera vez que acontece este tipo de incendios
descontrolados. Cada provincia tiene en su memoria estos terribles acontecimientos.
El cambio climático, y la siempre rezagada respuesta de los Estados ante una
realidad que vemos todos los días: de ríos contaminados, de grandes sequias, de
lluvias devastadoras, de especies animales en peligro de extinción, nuevas
epidemias, y un largo etc., parece una constante.
Supuestamente hemos alcanzado el nivel de desarrollo
político y cultural mas grande de la historia, sin embargo, es inexplicable los
desastres que ocurren en el mundo, cuando el Hombre se ha apoderado de él y lo
moldea a su placer. Quizás sea mejor cuidar el mundo como nos lo enseñó nuestro
Soberano en los Cielos: aprender su magia, y convivir con ella. Porque esa
magia, es la de Dios.
Hoy no es tiempo de buscar responsables a lo ocurrido,
porque en mayor o menor grado, todos, y digo TODOS tenemos una cuota de culpa
de lo que ocurre. Tratar de buscar UN SOLO responsable, es armar un cadalso
mediático y ejecutar al que deliberadamente, todos le hayan soltado la mano;
aquellas manos de todo el resto de los responsables.
Hoy debemos buscar un NUNCA MAS. No solo para Corrientes,
sino para toda la Argentina. Si es preciso crear un comité para evitar estos
acontecimientos, SEA ASI. Pero lo cierto es que la NATURALEZA esta enferma,
esta cansada, ya no espera nada bueno del hombre.
Gobernamos desde metrópolis de cemento, exprimiendo todo a
su paso, extendiendo el desierto exterior e interior.
En el mundo griego, estaba la deidad ARTEMISA considerada
Diosa de la Naturaleza; pero al mismo tiempo, era también de la caza, de los animales
salvajes, de la virginidad, de la cura de enfermedades. Ella quitaba la vida y
la daba. Ella era equilibrio. Asimismo, la artemisa es en nuestras tierras de
argentum, una planta curativa, de grandes propiedades. El simbolismo es claro:
Dios, Uno y Trino puso al Ser Humano como rector de la Creación, y con su Libre
Albedrío podría llevar a cabo una buena obra o llevarla a su destrucción: El
poder de dar vida, o de quitarla; de enfermar o de sanar.
En este Domingo del Hijo Prodigo, no levantemos cadalsos,
hagamos como todos los voluntarios que salen de sus casas, y viajan kilómetros
para tratar de terminar con el terrible incendio que asola la Provincia de
Corrientes. Luego habrá tiempo de encontrar las causas, pero para que ello sea
EFECTIVO: deben surgir soluciones, para que nunca mas vuelva a pasar.
Vladyka TEOFANO, Juan M. Garayalde
Archieparquía Argentina de la Iglesia Ortodoxa Bielorrusa Eslava en el
Extranjero
Comunidad San Pacomio - Almirante Brown - Provincia de Buenos Aires
Domingo del Hijo Prodigo - TRIODON
