CRISTOPOLIS: La Ortodoxia Americana llega a El Salvador

LA ORTODOXIA AMERICANA LLEGA A EL SALVADOR

Comunidad Ortodoxa "El Salvador del Mundo" presidida por el Rvdo. Proto Presbitero AGUSTIN, Leonardo Hernández Cuellar

I – La República de El Salvador, en la búsqueda de Dios, de la Unión y de la Libertad.-

El 15 de septiembre de 1821, nacía lo que hoy se denomina la República de El Salvador, bajo el lema “Dios, Unión y Libertad”. Este camino que fuera iniciado por muchas colonias de España desde 1809, en los tiempos de la crisis de los borbones en España, en Sudamérica se consolida en 1926 con la batalla de Ayacucho en el corazón del ex imperio español, en el Perú.

Su ciudad capital, San Salvador, fue fundada en dos periodos, 1525 y 1545 donde consolidó su población. Tierra de toltecas, mayas y volcanes fastidiosos, a esta joven república le costó mucho lograr un camino de verdadera independencia. De 1811 a 1821, la lucha por alcanzar la independencia del Virreynato de Nueva España, luego, la lucha entre si pertenecer al efímero Imperio Méxicano a las Provincias Unidas del Centro de América, pero esta lucha por una identidad, también se desarrollaba en el seno de su población, con los levantamientos indígenas que protestaban contra la explotación y la tradicional disputa de todos los países independizados de España, de los conservadores vs. los liberales. Nacerá una “república cafetalera” y las tierras comunales y ejidales (tierras públicas) serán pasadas a manos privadas consolidando una aristocracia económica. Con la crisis económica mundial de 1930 que también afectó a El Salvador (caída de los precios internacionales del café), se inició el período de gobiernos militares de tendencia conservadora, cuya característica fue reprimir, principalmente en los primeros años todo tipo de reclamos sociales, como el levantamiento del indígena Feliciano Ama, que fue ferozmente reprimida con miles de muertos, incluyendo su líder. En los años ’80, la historia de este sufrido país no varió mucho: la aparición del Frente Faraundo Marti para la Liberación Nacional de tendencia marxista-leninista, confrontará a los gobiernos pseudo democráticos de los años ’80, periodo que coincidió con la colaboración de los Estados Unidos en la lucha contra las guerrillas financiadas por Cuba y la URSS en toda la región. Fue en ese período en el que se produjo la trágica muerte del Arzobispo de San Salvador, Oscar Arnulfo Romero en 1980, un símbolo de un pueblo que cayó en una locura asesina que costó la vida de miles de inocentes.

El Rvdo. Proto Presbitero AGUSTIN, Leonardo Hernández Cuellar, responsable en la República de El Salvador, del Patriarcado de Su Beatitud ATHANASIOS 1ro. ALOYSIOS, Patriarca Católico Ortodoxo Ecuménico de las Américas, Eurasia, África y Oceanía, Sucesión Sto. Wolodymyr, Walther Myron Propheta de la American Orthodox Catholic Church

El Rvdo. Padre AGUSTIN, dió sus primeros pasos en la Iglesia Anglicana y en el año 2013, abrazó la tradición católica ortodoxa.

El Padre AGUSTIN en los barrios humildes de El Salvador, llevando la palabra del Evangelio.

Hoy, se construye una nueva historia. Los militares volvieron a sus cuarteles, las guerrillas bajaron las armas al desplomarse simultáneamente con ello el “Muro de Berlín” y todo aquello que lo mantenía en pié separando el mundo en dos facciones irreconciliables. Los ciudadanos comienzan a votar, queda en el olvido los tiempos de los fusiles. Quizás, el espíritu del mártir arzobispo Romero, hoy pueda descansar al ver su tierra iniciando un periodo de paz, y de esta manera, sea digno para todos los salvadoreños, portar con orgullo su bandera con su frase de “Dios, Unión y Libertad”. Pero nada dura, sino se cuida, y son los políticos los que deben cerrar las heridas y pensar en el futuro. La historia, no se debe escribir con odio, porque ello siempre traerá como consecuencia, dos historias, contrapuestas, irreconciliables y latentes a la espera de volver a presentar batalla.

Y toda esta breve, brevísima y seguramente imperfecta presentación de este país, es para mostrar a los fieles de nuestra iglesia un lugar, mágico, hermoso, sufrido y esperanzador, donde hoy, incardinamos al Rvdo. Padre AGUSTIN, Leonardo Hernández Cúellar, nuestro primer Proto Presbitero, de la naciente Eparquia Católica Ortodoxa del Rito Bizantino, del Patriarcado de SB Athanasios 1ro. Aloysios, heredero del linaje de Sto. Wolodymyr, Walter Myron Propheta, de la American Orthodox Catholic Church (AOCC), primer Patriarcado Católico Ortodoxo genuinamente americano.

II - Nacimiento de la Comunidad Católica Ortodoxa El Salvador del Mundo

La ortodoxia en América, como lo hemos dicho en otros trabajos, es una rareza en un continente donde ha conocido mas la tradición Católica Romana, la tradición protestante y las corrientes evangélicas que crecen, estas últimas desde Alaska a Tierra del Fuego. A lo que hay que mencionar en estos tiempos una reivindicación de las tradiciones religiosas “precolombinas” o de pueblos originarios.

Centroamérica, fue cuna de grandes imperios y de la irradiación de otros. Lugar mágico que enlaza dos masas continentales y dos océanos. Un sitio que sigue guardando misterios de la humanidad bajo sus rocas, una tierra que feroces volcanes que no deja pasar los milenios sin mostrar su presencia y predominio sobre todos los reinos animales y vegetales.

El Rvdo. Padre AGUSTIN recorriendo las ciudades de El Salvador

El Rvdo. Padre AGUSTIN escuchando a los vecinos de su ciudad

En esta tierra tan importante hoy tiene un representante de la ortodoxia caminando por las calles de las ciudades de El Salvador, República que remoja sus costas sobre el Océano Pacífico, y que posee centinelas de piedra y fuego como los volcanes de Santa Ana, San Vicente, Tecapa, Conchagua, entre tantos otros.

El Padre AUGUSTIN, Leonardo Hernández Cuellar, se sumo al clero de la Iglesia Ortodoxa Bielorrusa Eslava en el Extranjero en el año 2013, luego de un largo trabajo en conjunto con el Eparca de Buenos Aires y Secretario de Asuntos Externos del Patriarcado de SB Athanasios 1ro. Aloysios, el Vladyka Teofano, Juan M. Garayalde, tuvimos la alegría de ver el primer sacerdote en El Salvador del Patriarcado Católico Ortodoxo Ecuménico de las Américas, de la Sucesión Sto. Wolodymyr, American Orthodox Catholic Church.

Siendo El Salvador uno de los países de América Central más densamente poblados, el trabajo ahí es inmenso, y oramos para que el Padre Agustín tenga más gente a su lado para emprender este difícil camino, mas siendo él primero, el Proto Presbítero, fundador de la primera comunidad.

UKAZ de Incardinación Nro. 004/aocc-iobe-br/2014, firmado por SB Athanasios, Patriarca Católico Ortodoxo Ecuménico de la Sucesión Sto. Wolodymyr de la American Orthodox Catholic Church y firmado por S.E.R. Mar Jacob, Archieparca Coadjutor del Brasil y Gran Canciller del Patriarcado

La Comunidad Ortodoxa "El Salvador del Mundo" marca la fundación de una comunidad de misioneros que transitan diferentes barrios y lugares para asistir a la gente.

El Rvdo. Padre AGUSTIN, aparte de tener buenas capacidades musicales, es profesional en el área de la educación física y nutrición.

Nuestra Iglesia tiene la función en este continente de buscar el resurgimiento de lo sagrado, reencontrarnos con las problemáticas sociales, pero no para emparchar problemas, sino para ayudar a las personas a alcanzar sus anhelos, alcanzando la plenitud de los sueños de cada habitante de esta hermosa América.

Busquemos todos juntos el camino a nuestro Señor Jesucristo, y lograr lo que San Juan Crisóstomo nos decía:

" ¿Hay algo que pueda igualar esta «buena nueva»? Dios sobre la tierra y el hombre en el cielo; el restablecimiento de la armoniosa jerarquía de los seres: los ángeles cantando junto con los hombres, los hombres que se asocian a los ángeles y a los espíritus celestes. ¡Qué espectáculo más maravilloso que ver cesar la guerra tan antigua como el mundo, ver a Dios reconciliado con los hombres, el diablo vencido, los demonios en fuga, la muerte vencida, el paraíso abierto, la maldición cancelada, el pecado desterrado, el error destruido, la verdad restablecida, la palabra divina sembrada y germinando en todas partes, la vida del cielo trasplantada a la tierra!"