GRANDES Y PEQUEÑOS PASOS
A veces, solemos escuchar que para llegar a ser alguien
importante, es necesario hacer cosas de gran relevancia para la sociedad.
Para convertirnos en eso, primero debemos emprender MUCHAS
ACCIONES aparentemente de poca importancia o insignificancia, pero que, en el
fondo, no serán ni intrascendentes ni insignificantes.
Quienes en la vida han dado grandes saltos y han fracasado,
abandonaron sus metas ante el esquivo resultado. Si hubieran escuchado a los
staretz, habrían dado MUCHOS saltos pequeños, antes de alcanzar aquel que le
produjo la caída, y superarlo sin dificultar yendo aún más allá.
Aquí se dirime la lucha interior entre el fuego de una
pasión pasajera, por el de mantener una llama constante, que nunca se vea
amenazada por la oscuridad.
Si tomamos el segundo camino, con el tiempo inexorablemente,
nos convertiremos en ALGUIEN que se respetará a sí mismo y, hacia fuera, al
decir de Goethe: convertirse en ALGUIEN que hará cosas de importancia según sus
testigos, sus circunstanciales espectadores.
La realidad, es que no hizo realmente nada de gran
importancia, sino que mantuvo la llama encendida, que a los demás los estará
obnubilando.
Camino de la Jangada
No hay comentarios:
Publicar un comentario