Violencia Escolar en Tiempos Posmodernos

VIOLENCIA ESCOLAR EN TIEMPOS POSMODERNOS

Uno de los desafíos que afronta la juventud en la actualidad es el problema de su educación. En los tiempos en que la era Moderna era sólida, según el término acuñado por el sociólogo Zygmunt Bauman, y con un Estado Laico que desplaza la religión como elemento formador básico de los individuos y organizaciones.

Se creyó poder domesticar a todas las personas haciéndola parte de una institución desde el nacimiento de la persona hasta el fallecimiento, creándose estructuras de relevamiento para la formación del nuevo ciudadano: la familia burguesa debía preparar al niño para la escuela; esta, debía continuar con su instrucción para lograr que la persona estuviera preparada para ingresar al mercado laboral.

Un destacado elemento de esta construcción moderna, es que no había lugar para los enemigos o disconformes del sistema. Quien se negara a ser domesticado por las nuevas reglas de los Estados Modernos, también existirían instituciones dedicadas a reformarlos: el manicomio o la cárcel en el mundo capitalista. El manicomio o el GULAG en el mundo comunista.

Se nacía en un hospital, institución del sistema de salud que lo registraba.
Moría en un cementerio, donde registraba su defunción.
El hombre nacía, vivía y moría en diversas instituciones del Estado Moderno.

Se desarrolló un sistema educativo que debía crear ciudadanos que habrían de aprender y obedecer las leyes del Estado Nación. En la República Argentina, uno de los creadores del sistema educativo fue Domingo Faustino Sarmiento, que escribió “Civilización o Barbarie”. En dicha obra, para este representante del iluminismo, todas las tradiciones debían ser borradas, y reemplazadas por procesos de modernización. La religión, las tradiciones precolombinas y gauchescas, no podían ser parte del nuevo Estado. Todo debía quedar relegado a lo folclorico, lo anectodico, lo curioso. La ciudad es cuna de la civilización y la cultura. El campo, era el lugar de la barbarie donde no había ley ni “orden”.

Rousseau, Guizot, Kant, Tocqueville, los Federalistas, Adam Smith, los enciclopedistas, Voltaire, eran los ideólogos de la Era Moderna, y fundamentos de la nueva educación.

Pero dicha ruptura que ya lleva 200 años, hoy se encuentra en crisis, y dentro de esas estructuras de relevamiento es la escuela la que mas problemas a presentado. Frente a nuevas generaciones de alumnos dentro de una era “posmoderna”, la escuela posee una rígida estructura moderna. El conflicto, es inevitable. Los jóvenes ya no reconocen la autoridad. Como ejemplo de esta crisis, aquellos posee un saber técnico que superan a sus padres principalmente en el campo de la informática. Sobreviene una ruptura que en milenios jamás se había presentado. Frente a esta crisis, la religión mira desde afuera el mundo creado por los iluministas. Sin embargo dichos arquitectos se niegan a buscar las respuestas en los milenios de sabiduría que hay tras las grandes religiones. Avanzan inexorablemente hacia un abismo, improvisando, sosteniendo con materiales inservibles una estructura –el Estado Moderno- que se desmorona.

Los síntomas más espantosos que se han vislumbrado en las últimas tres décadas, han sido las frecuentes masacres perpetradas por alumnos en universidades y colegios. Es el síntoma de un rechazo absoluto a la utopía moderna del progreso indefinido. ¿Qué hacer frente a eso?.

* * *

Trabajando para el Ministerio de Educación de la Ciudad de Buenos Aires, un equipo interdisciplinario integrado por una licenciada en Ciencias de la Educación, un Abogado, especialista en problemas legales en el ámbito escolar; un profesor de Filosofía, y en mi caso licenciado en Ciencia Política y teólogo de la Iglesia Ortodoxa Bielorrusa Eslava, decidimos armar un curso con el objetivo de brindar capacitación a los docentes de la Ciudad de Buenos Aires, dentro del marco de la capacitación gratuita que brinda el Ministerio de Educación.

La denominación del curso es: “De Columbine a Carmen de Patagones. La violencia llega a las escuelas”.-

El Profesor Santiago Giromini (derecha) y el Fr. Teofano (izquierda) en la apertura del curso "De Columbine a Carmen de Patagones. La violencia llega a las escuelas"

En estos temas que nos compete a todos, y realizando una autocrítica desde la institución eclesiástica: uno no debe desde el púlpito señalar con su dedo acusador un “yo les dije!” por apartarse de las enseñanzas de la Iglesia. Por algo el iluminismo triunfo por sobre los valores de la cristiandad medieval. La caída, viene de lo alto, no de lo mas bajo. Como un niño, sacamos las características de nuestros padres: los iluministas son hijos de la cristiandad medieval. Algo habrá ocurrido para que surjan pensadores que no quisieron tener más a nuestra Sagrada Biblia y a sus teólogos como padres de la enseñanza.

Docentes de la Ciudad de Buenos Aires asistiendo al curso

Por ello, hay que seguir hoy mas que nunca los consejos de San Basilio, que en un escrito dirigido a los jóvenes, decia refiriendose a los educadores: “nosotros debemos considerar que nos espera un combate, el más violento de todos los combates; por lo cual hemos de trabajar y sufrir todo lo que podemos soportar para prepararnos a él; y hemos de consultar a todos aquellos hombres, sean poetas, historiadores u oradores, que puedan proporcionar alguna utilidad provechosa para nuestras almas” (San Basilio – “Discurso a los jóvenes”. Editorial Lumen, Buenos Aires, 1988).

En este mundo en crisis, que ninguno pretenda tener la verdad absoluta. Todos debemos participar en la restauración de un equilibrio, y en nuestro caso específico, inspirado en lo Sagrado.

En posteriores escritos, iremos compartiendo con ustedes, el contenido del trabajo académico realizado.

Xristos Anesti!

Fr. Teofano +