La Modernidad y el Ocultamiento de la Escalera al Cielo - Parte II

LA MODERNIDAD Y EL OCULTAMIENTO DE LA ESCALERA AL CIELO 

Ludwig A. Feuerbach

PARTE II

En el camino de la inversión del mundo, de la entronización del hombre como “dios”, como verdugo depredador de la naturaleza, como redactor de nuevas “tablas”, que establece una alianza con lo infernal, o sea todo aquello que se aleja de Dios y se hunde en la ignorancia, en el pecado, y en la autodestrucción de la humanidad; avanzamos con un nuevo intelectual clave, bisagra de este proceso descrito.

El filósofo alemán LUDWIG A. FEUERBACH (1804-1872), que desde joven inició una confrontación contra la “derecha” hegeliana en Alemania y una crítica feroz a la religión. Una de sus obras, “La esencia del cristianismo” (Das Wesen des Christentums) de 1841, fue de enorme influencia filosófica para un Carl Marx y para un Federico Engels. El primero, llegó a comparar poeticamente a Feuerbach con el “anticristo” que venía a mostrar la “esencia del cristianismo” al ambiente intelectual de su tiempo.

En tanto para Compte, la religión era una “alteración espiritual” en el camino “evolutivo” del hombre, para Feuerbach, era una “alteración antropológica”, lo que implicaba que la religión proyecta a Dios toda la esencia, aspiración y destino del hombre, cuando la realidad para Feuerbach es "la nueva filosofía es la resolución completa, absoluta, coherente, de la teología en antropología" (1).

Para el filósofo alemán, el hombre estaría renunciando a su propio REDESCUBRIMIENTO, revelación de sus cualidades, para asignarlas a Dios, como un deseable e inaccesible ideal. Como consecuencia, había una eterna lucha como INDIVIDUO, para alcanzar la inmortalidad, siendo para el autor, que dicha “inmortalidad” solo se logra como “HUMANIDAD” en su desarrollo histórico.

Feuerbach coincidirá con Compte: “la religión es la esencia de la infancia de la humanidad” (2), por lo que el hombre deberá emanciparse, liberarse de la ALIENACIÓN RELIGIOSA y avanzar a una madurez filosófica, recuperar su conciencia y no proyectar fantasías como las que presenta el cristianismo.

El filósofo alemán presente la religión como “una ilusión, sin embargo, nada inocua, porque ejercita sobre el hombre una influencia fundamentalmente perniciosa y funesta, destruye sus fuerzas para la vida real y le hace perder el sentido de la verdad y de la virtud" (3)

Compte desde las ciencias y Feuerbach desde la filosofía, expulsaban a Dios. Faltaban dos pasos más para cerrar este circulo siniestro de la Modernidad: desde la política, y desde la sanación interior, la psicología moderna.

NOTAS:

1,2 y 3: L. Feuerbach - "La esencia del cristianismo" . Ed. Trotta- España