viernes, 30 de julio de 2010

LA ORACIÓN CATOLICA ORTODOXA

LA ORACIÓN CATÓLICA ORTODOXA
El camino a CRISTOPOLIS



La oración nos permite la participación en la vida divina de la Santísima Trinidad. La deificación.



¿Cuál es la meta de la oración?. Generalmente la utilizamos para solicitar cosas, pedir perdón por otras, agradecer también. Todas ellas tienen un objetivo mediato. A nuestra plegaria estará por lo general atada a un resultado que pronto deverá evidenciarse en nuestras vidas.


Los eclesiásticos cuando oramos, por ejemplo durante la Divina Liturgia, hemos de hacerlo con el corazón abierto, por aquellos que asisten a la ceremonia, por aquellos que ya no están entre nosotros, por nuestros gobernantes, por nuestra ciudad. También, en la oración están presentes nuestros Santos, y nuestros superiores en la jerarquía religiosa, y según la Liturgia elegida, también se saluda a los antiguos Patriarcados que fueron conformando la Cristiandad.


Pero falta un estilo de oración, que para los católicos ortodoxos es la verdadera meta de la oración. No participa en ella las peticiones. Esta oración nos adentra en el espacio de lo que es santo, ingresar en el sitio donde hemos de hallar a Dios. “Orar sin cesar” decía el Apóstol, y esa es la base de la ascesis, de la oración hesicasta, de la oración que nos hace ir mas allá de objetivos mediatos. Es el camino a la felicidad, donde comenzamos a participar del Reino y Sabiduría del Dios Incognoscible en nuestro camino a la deificación, el encuentro personal con Dios, participando de la vida divina de la Santísima Trinidad.


Un teólogo contemporáneo, el Protopresbítero Georges Florovsky (1893-1979) nos dice: la oración es “más que una serie de actos especiales y ocasionales de devoción ... El culto divino debe ser constante; debe ser más un hábito que un acto. En realidad, servidor a Dios en el culto divino significa permanecer constantemente en su presencia. Y tal es la talla de una forma cristiana de vivir: ¡no estar fuera de la presencia de Dios!... Un cristiano tiene que celebrar el culto divino en la totalidad de su existencia, en todos los caminos y situaciones de su vida” (Escritos sobre el Cristianismo).



Protopresbítero Georges Florovsky Vasilievich (1893-1979)


Aquellos que sientan que hacen muchos esfuerzos en su vida y la tranquilidad no les llega. Oren.

Aquellos que ven que su trabajo cotidiano no alcanza para cumplir aquellas metas soñadas. Oren.

Aquellos que ven con amor a aquellos que los rodean, pero solo recibe desprecio y desinterés. Oren.


La vida puede ser injusta, pero en la oración, aprendemos a entender el mundo que vivimos, puesto que al estar frente a Dios, se entiende el porque del sufrimiento que rodea a los demás que han perdido el rumbo. Para el teólogo Florovsky, el hombre adquiere VIDA por el hecho de estar orientado hacia Dios, y ahí encuentra su LIBERTAD INTERIOR.


Dentro del camino que vino a trazarnos Cristo, no hay dolor, solo felicidad. Él nos llama, puesto que: “Como Dios, yo estaré unido con vosotros como dioses” (Canon del Gran Domingo).


Xristos Anesti!

Mons. Teofano

Eparca Coadjutor para la República Argentina

Iglesia Ortodoxa Bielorrusa Eslava

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