Un día con el Padre Franz

UN DÍA CON EL PADRE FRANZ

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Padre Franz Primozic, párroco de la Capilla de Piedra de San Jorge

Para nosotros, el verdadero objetivo de la vida cristiana es la adquisición del Espíritu Santo de Dios. Es el momento mas alto de la iniciación en la espiritualidad ortodoxa. Decía el Apóstol Pablo: “El Reino de Dios, no es el comer y el beber, sino la justicia , la paz y el goce, por el Espíritu Santo” (Rm. 14, 17).

¿Qué medios utilizamos para lograr que el Espíritu Santo descienda en nosotros?. Son la plegaria, el ayuno, las vigilias, la limosna, la conmemoración de las fiestas litúrgicas y otras acciones virtuosas realizadas en NOMBRE DE CRISTO, porque todas ellas están dirigidas a Él, exclamando con fuerza su Santo Nombre.

De todos estos medios para alcanzar la Gracia del Espíritu Santo, una de ellas es la de cuidar a aquellas personas desamparadas ante la crueldad de sistemas económicos materialistas que pensando a las personas abstractamente como números, olvidan el papel sagrado que cumplen para sostener la Ciudad Terrenal. Como se a hecho por siglos, la comunión de fieles de Cristo ayudan al prójimo a que salgan de su pobreza material y espiritual.

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Un día domingo, bajo el fuerte sol del verano, fui a visitar al Padre Franz que iniciaba su recorrido por diferentes supermercados del inmenso conurbano bonaerense, para buscar donaciones para proveer a la gente humilde que se acerca a la Capilla de Piedra de San Jorge en la localidad de San Vicente, Provincia de Buenos Aires.

Así, en una vieja camioneta al cual me sería imposible verificar la fecha en que fue construido, salimos a buscar donaciones.

Como esos perros fieles que acompañan al pastor, ese viejo vehículo avanzaba por las calles, y a pesar de verse superado en velocidad por autos a los que le superaría en mas de 40 años de vida, sin embargo avanzaba majestuoso, fuerte, confiable inundado con una fuerza propia que se hacía respetar. Ese vehículo ... es para nosotros un místico carruaje que funciona con la magia de Dios, quién nos lo brindo para que el Padre Franz cumpla con su obra.

Llegamos finalmente a la puerta de un inmenso galpón de un supermercado Carrefour de Temperley. Ahí, son amplias sonrisas nos reciben unos muchachos que nos acercan las cajas que gentilmente nos entregan para distribuir en familias y comedores infantiles. Una joven muchacha del lugar, se acerca para pedirle unos consejos al Padre Franz con la cual quedan conversando un momento. Luego observo que con sus manos presiona sobre los lóbulos de las orejas de la muchacha en tanto ella se fruncía sonriendo un poco nerviosa. No me atreví a preguntar si lo que efectuaba era una curación o una reprimenda...

Cargado el camión, emprendemos el regreso a la Capilla de Piedra de San Jorge, donde luego de más de media hora de viaje -donde el arrullo del vehiculo me hizo cabecear varias veces por el sueño-, al llegar, comenzamos a bajar las cajas y clasificar los productos; de esta manera, para que estén listas y ser distribuidas en la zona.

El Padre Franz y el Padre Teophanos bajando las donaciones la camioneta

Así, se armaron cajas con harina, sal, fideos, pan lactal, unos budines navideños sobrevivientes de las últimas fiestas, latas de conservas, alimentos balanceados para mascotas, y así una gran cantidad de cosas realmente útiles para cualquier familia.

El Padre Franz inicia el proceso de clasificar los alimentos recibidos y luego prepara las cajas con diferentes alimentos para distribuir

Durante el viaje de regreso, me cuenta el Padre Franz que a veces el esfuerzo que realiza para ayudar a la gente no tiene los resultados que él esperaba. Lo noto en esas conversaciones apesadumbrado. Las personas que realmente necesita alimentos para la casa, son muy agradecidos y continuamente se ofrecen a colaborar con la Iglesia, a veces tan solo pidiéndoles que oren por aquellos que menos tienen. Pero, otras personas a veces se acercan pensando que tienen el derecho de llevarse las cosas, sin agradecer nada, hasta a veces eligiendo que llevarse y desechando otras. Las últimas décadas en la Argentina, el Estado acostumbro a las personas pobres y desempleadas a vivir de subsidios, y todo aquello que involucre un digno trabajo, es despreciado.

Sin embargo, al Padre Franz se le ilumino el rostro al relatarme su experiencia cuando llevo importantes donaciones a un poblado de la provincia de Salta, donde los niños y sus padres salían con los brazos abiertos a agradecer e invitar a los visitantes a pasar a sus humildes hogares.

Es muy difícil olvidar el rostro de un niño que recibe contento un simple juguete. Ese niño, no esta con esa sonrisa valorando el juguete, sino a esa persona vestido con atuendo oscuro frente a él, que vino de tan lejos para dárselo.

Mientras pienso estas cosas, lo veo al Padre Franz peleando con su celular, tratando de averiguar si unos remedios que envió a Salta por encomienda habían llegado. Él no se olvidó de esa gente, que lejos están físicamente, pero muy cerca están en espíritu y oración ...

Todos los días la obra de la Caridad se efectúa en la Capilla de Piedra.
Todos aquellos que puedan aportar algo ... ahí irá el Padre Franz con su vieja y fiel camioneta a buscarlas. Si es comida, si son viejos y olvidados hierros, madera, aparatos eléctricos descompuestos, ropa .. todo sirve. El mundo actual compra y deshecha todo. La milicia de Cristo nunca desecha nada. Todo puede tener un buen propósito cuando el Espiritu Santo nos guía.

Soy de los que creo que el Espíritu Santo ya descendió sobre la Capilla de Piedra y ha bendecido todo lo que toco.

Capilla de Piedra de San Jorge en la localidad de San Vicente, Provincia de Buenos Aires

Xristos Anesti!

Fr. Teophanos +